Desde las tierras de Oaxaca, surge Mezcal Mur, una bebida que rinde homenaje a una criatura esencial para nuestro ecosistema: el murciélago.

Este mamífero nocturno juega un papel vital en la polinización de los agaves, permitiendo la larga duración de esta planta fundamental en la elaboración del mezcal.

Cada año, miles de murciélagos recorren grandes distancias en busca del néctar de la flor de agave, el quiote, contribuyendo significativamente al crecimiento de los cultivos de agave en México. Este proceso natural es crucial para mantener la biodiversidad y asegurar la producción sostenible del mezcal. Mezcal Mur encapsula esta conexión con la naturaleza, honrando al murciélago como símbolo de su compromiso con la sustentabilidad y el ciclo de vida del agave.

Compromiso ambiental

En Mezcal Mur, la sostenibilidad es una prioridad, la marca implementa prácticas agrícolas responsables que respetan el ciclo natural del agave, evitando el uso de pesticidas y fertilizantes químicos. Además, su compromiso con la reforestación y la conservación de los ecosistemas agaveros asegura que cada botella de este destilado no solo brinda una experiencia sensorial única, sino que también contribuye a la preservación del medio ambiente, la preservación y cuidado del murciélago, nuestro aliado principal en la polinización del agave.

Artesanía en cada gota

La creación del mezcal comienza con la cocción lenta de las piñas de agave en hornos de piedra, un método tradicional que crea el sabor ahumado del mezcal. Las piñas se cocinan lentamente, liberando un aroma dulce que revela el corazón de este exquisito elixir. El siguiente paso es la molienda del agave cocido, cuyo bagazo se coloca en tinas de roble para una fermentación completamente natural. Sin la adición de químicos, sólo agua, el agave fermenta de manera tradicional, siguiendo métodos ancestrales.

El proceso de destilación se realiza en alambiques de cobre, cuidando y purificando el mezcal en dos etapas. Este método artesanal garantiza que cada gota de Mezcal Mur conserve su esencia y pureza. La elaboración de este mezcal es un verdadero arte, donde cada paso del proceso es realizado a mano por maestros mezcaleros que han perfeccionado su oficio a lo largo de generaciones. Este compromiso con la artesanía se combina con un enfoque en el lujo, creando un destilado que no solo se saborea, sino que se disfruta. Cada botella es una obra de arte en sí misma, diseñada para reflejar la elegancia y el prestigio de la bebida que contiene.

Ritual de degustación

Para disfrutar del mezcal, recomendamos tres sencillos pasos. Primero, observa las tonalidades del líquido para identificar si es blanco o añejado en barrica. Segundo, busca en tu memoria olfativa los aromas sutiles que surgen del mezcal. Finalmente, toma un pequeño sorbo para activar tus papilas gustativas, seguido de un segundo sorbo más generoso para saborear. Este ritual permite apreciar plenamente la complejidad de esta bebida espirituosa mexicana.

Celebramos la individualidad en la degustación del mezcal. Cada persona tiene su propio ritual y forma de disfrutar esta bebida única, y nosotros abrazamos esa diversidad. Porque al final, no hay una manera correcta o incorrecta de beber mezcal, solo la forma que te brinda el mayor placer.

Mezcal Mur es un ejemplo destacado de cómo la tradición y la innovación pueden coexistir armoniosamente. Con su enfoque en la sustentabilidad y la artesanía, la marca no solo preserva el legado del mezcal, sino que lo eleva a nuevas alturas de excelencia y lujo. En cada botella se encuentra un compromiso con la calidad, la naturaleza y la cultura que da vida a este destilado excepcional.

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