Saint Barth: Tres experiencias imperdibles en la isla más glamurosa del Caribe

Desde un picnic gourmet en las exclusivas playas cristalinas de tonos turquesa hasta deportes acuáticos en la reserva marina de Grand Cul-de-Sac, la isla francesa de San Bartolomé ofrece una serie de idílicas experiencias para los viajeros que buscan descubrir los rincones más hermosos del mundo.

Privilegiadamente ubicada en el mar Caribe, la isla de Saint Barthélemy –también conocida como Saint Barth, St Barths o San Bartolomé–, se ha convertido en uno de los destinos más glamorosos para vacacionar debido a la exclusividad que brindan sus poco más de 15 playas de arena blanca, el diverso ecosistema marino que la rodea y sus extraordinarias opciones de hospedaje, culinarias, de moda y de estilo de vida, dentro de un ambiente de máxima privacidad.

Como el lugar preferido de muchas celebridades y de aquellos que buscan redefinir el lujo a través de experiencias excepcionales, en St Barth se pueden encontrar tres actividades imperdibles para disfrutar de manera única, uno de los rincones más hermosos del planeta:

1. Idílicas playas de arena blanca

Con un promedio de 3,000 horas de sol al año, ya sea en la bella Saline, la impactante playa Gouverneur o la peculiar Shell Beach, obtener el bronceado perfecto toma un nuevo significado al caminar entre las casi imperceptibles olas en tonos turquesa rodeadas por formaciones rocosas y la flora y fauna locales.

Para elevar a nuevos niveles la experiencia de asolearse en las playas vírgenes de arena blanca y prácticamente privadas, Le Sereno St Barth, uno de los hoteles más emblemáticos del destino, ha creado el picnic Larusmiani, en conjunto con la prestigiosa marca de sastrería italiana y cuya única boutique en tierras caribeñas se encuentra dentro de la propiedad, la cual consta de una lujosa cesta de picnic con vino rosado y tapas mediterráneas hechas por su afamado chef ejecutivo, Raffaele Lenzi… Una verdadera escena de película con vistas inmejorables a lugares tan espectaculares como la bahía de Grand Cul-de-Sac.

1. Entretenimiento V.I.P.

La capital de la isla, Gustavia, representa todo lo que un distrito de entretenimiento debe ofrecer pero con la exclusividad característica de este sofisticado destino: Bistrots y restaurantes de cocina internacional, divertidos clubes, una plaza central rodeada por impresionantes yates en el puerto principal y boutiques de las marcas de moda más afamadas a nivel mundial: Cartier, Bvlgari, Hermès, Louis Vuitton, Dolce & Gabbana, Prada e incluso algunas dentro de hoteles como la casa italiana Larusmiani –la primera en llegar a la isla y ubicada en el Le Sereno– que muestra en sus icónicos escaparates piezas que han sido diseñadas para encontrarse únicamente en St Barth.

Sin importar si el viaje es con amigos, familia o pareja, inigualables experiencias de esparcimiento están esperando por todos.

1. Exclusivas actividades acuáticas y hospedaje excepcional

Como el lugar perfecto para los amantes de las actividades acuáticas, en la isla se puede encontrar desde remo en kayaks o stand up paddle hasta buceo pero existen un par en especial, que se pueden practicar específicamente en la bahía Grand Cul-de-Sac, una reserva marina protegida por una barrera de coral en la que contínuamente se pueden observar tortugas y peces de innumerables colores: El windsurf y kitesurf, debido a su tranquilo oleaje y vientos constantes.

Estas y otras exclusivas actividades se complementan con el hospedaje de Le Sereno St Barth, cuyas amplias suites y villas han sido perfectamente diseñadas para ofrecer un ambiente de paz y tranquilidad; además su restaurante principal, Al Mare, a cargo del chef Davide Mosca, ofrece un menú repleto de delicias italianas contemporáneas y una carta de bebidas que honra el atemporal Negroni, conformando así, una de las experiencias imperdibles en el destino.